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¿Por qué un Dios Bueno creó un Diablo Malo?

La Biblia dice que fue el diablo (o Satanás), en la forma de una serpiente, que tentó Adán y Eva y provocó su caída.  Eso revela una pregunta importante: ¿Porque Dios crearía un diablo ‘malo’ (un ‘adversario’) para corromper Su creación buena?

Lucifer – el Brillante

En realidad, la Biblia dice que Dios creó un espíritu poderoso, inteligente y hermoso, que era el jefe entre los ángeles. Se llamaba Lucifer (lo que significa ‘El que brille’) – y era muy bueno. Pero Lucifer también tenía libre albedrío, y podía hacer sus propias elecciones.  En un pasaje en Isaías 14 se encuentra la elección que tuvo:

!!Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones.

Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo. (Isaías 14:12-14)

Lucifer, como Adán, se enfrentó a una decisión. Podía aceptar que Dios era Dios, o podía decidir de ser un dios para sí mismo.  Sus “Voy a” frecuentes demuestran que eligió desafiar a Dios y declararse a sí mismo como “Más Alto”.  Un pasaje en Ezequiel da una explicación paralela de la caída de Lucifer:

En Edén, en el huerto de Dios estuviste… yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas.

Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad.

A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector.

Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojaré por tierra… (Ezequiel 28:13-17)

La belleza, sabiduría y poder de Lucifer – todas las cosas buenas creadas en él por Dios – condujo al orgullo. Su orgullo condujo a su rebelión, pero nunca perdió ninguno de sus poderes y habilidades. Ahora está dirigiendo una revuelta cósmica contra su Creador para ver quién será Dios.  Su estrategia era reclutar a la humanidad para unirse a él – tentándolos a la misma elección que él hizo – amarse a sí mismos, independizarse de Dios y desafiarlo. El corazón de la prueba de la voluntad de Adán fue el mismo que el de Lucifer; simplemente se presentó de manera diferente. Ambos eligen ser ‘dios’ para ellos mismos.

Satanás – trabajando a través de otros

El pasaje en Isaías está dirigido al ‘Rey de Babilonia’ y el pasaje en Ezequiel está dirigido al ‘Rey de Tiro’. Pero con las descripciones dadas, está claro que no se aborda a ningún ser humano. Los “Voy a” en Isaías describe a alguien que fue arrojado a la tierra como castigo por querer colocar su trono por encima del de Dios. El pasaje en Ezequiel se dirige a un “guardián angélico” que un día se mudó al Edén y a la “montaña de Dios”. Satanás (o Lucifer) se pone a menudo detrás o a través de alguien más.  En Génesis, habla a través de la serpiente. En Isaías gobierna a través del Rey de Babilonia, y en Ezequiel posee al Rey de Tiro.

¿Por qué Lucifer se rebeló contra Dios?

Pero ¿por qué querría Lucifer desafiar al Creador todopoderoso y omnisciente?  Parte de ser “inteligente” es saber si puedes vencer o no a tu oponente. Lucifer puede tener poder, pero eso aún sería insuficiente para vencer a su Creador. ¿Por qué perder todo por algo que no podría ganar? Yo pensaría que un ángel “inteligente” habría reconocido sus limitaciones contra Dios – y contendría su revuelta. ¿Entonces porque no lo hizo?  Esta pregunta me desconcertó por muchos años.

Pero después me di cuenta de que Lucifer solo podía creer que Dios era Su Creador todopoderoso por fe, lo mismo que nosotros. La Biblia sugiere que los ángeles fueron creados durante la semana de la Creación.  Por ejemplo, un pasaje en Job dice:

Entonces respondió Jehová a Job desde un torbellino, y dijo:
“Donde estabas tú cuando yo fundaba la tierra?
Házmelo saber, si tienes inteligencia.
Cuando alababan todas las estrellas del alba,
Y se regocijaban todos los hijos de Dios” (Job 38:1-7)

Imagine a Lucifer siendo creado y volviéndose consciente en la semana de la creación, en algún lugar del universo. Todo lo que sabe es que ahora él existe y es consciente de sí mismo, y también que hay otro Ser que pretende haberlo creado a él y al universo.  Pero ¿cómo sabe Lucifer que esta afirmación es cierta? Tal vez, este supuesto creador apareció justo antes de que Lucifer apareciera. Y ya que este “creador” llegó antes, era (tal vez) más poderoso y (quizás) más conocedor que él, pero tal vez no. Quizás, tanto él como el ‘creador’ acababan de aparecer. Lucifer solo podía aceptar la Palabra de Dios que Él lo había creado y que Dios mismo era eterno e infinito. Y en su orgullo, él eligió creer en su fantasía en su lugar.

Tal vez parezca descabellado que Lucifer creería que tanto él como Dios (y los otros ángeles) simplemente “aparecieron”.  Pero es la misma idea básica detrás de los últimos pensamientos en la cosmología moderna.  Hubo una fluctuación cósmica de nada, y luego de esta fluctuación surgió el universo – esa es la esencia de las teorías de la cosmología moderna. Fundamentalmente, todos -desde Lucifer hasta Richard Dawkins y Stephen Hawkings y hasta usted y yo- debemos decidir por fe si el universo es autónomo o si fue creado y sostenido por un Dios Creador.

En otras palabras, ver no es creer.  Lucifer habría visto y conversado con Dios. Pero todavía tendría que aceptar ‘por fe’ que Dios lo había creado. Mucha gente dice que, si Dios simplemente ‘aparecía’ a ellos, entonces creerían.  Pero en la Biblia mucha gente vio y oyó a Dios, pero aún no tomó en cuenta su Palabra. El problema era si aceptarían y confiarían en Su Palabra acerca de Sí mismo y de ellos mismos. Desde Adán y Eva, hasta Caín y Abel, Noé, los egipcios en la primera Pascua, el cruce israelita del Mar Rojo, y hasta los que vieron los milagros de Jesús: “ver” nunca dio lugar a la confianza.  La caída de Lucifer es consistente con esto.

¿Qué está haciendo el diablo hoy?

Entonces, según la Biblia, Dios no creó un “diablo malo”, sino que creó un ser angélico poderoso e inteligente. A través del orgullo, dirigió una rebelión contra Dios, y al hacerlo se corrompió, manteniendo su esplendor original.  Tú, yo y toda la humanidad ya somos parte del campo de batalla en este concurso entre Dios y su “adversario” (diablo). La estrategia del diablo no es rodearse de siniestras capas negras como ‘Jinetes Negros’ en El Señor de los Anillos y poner maldiciones sobre nosotros.  Su estrategia es buscar a engañarnos de la redención que Dios había prometido al principio de los tiempos, a través de Abraham, a través de Moisés, y luego llevado a cabo en la muerte y resurrección de Jesús.  Como dice la Biblia:

Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras. (2 Corintios 11:14-15)

Debido a que Satanás y sus siervos pueden enmascararse como ‘luz’, somos más fácilmente engañados. Quizás es por eso que el Evangelio siempre parece ir en contra de nuestros instintos y contra todas las culturas.